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Nuestra Institución

Historia

El Colegio San Conrado, fundado en 1948 por los Frailes Capuchinos y las Sisters de San José de Brentwood, pertenece a la Iglesia Católica de la Diócesis de Ponce. Actualmente está dirigida por los Padres Diocesanos, las Sisters de San José de Brentwood con la colaboración y dedicación de profesores laicos. 

 

Su matrícula se compone de estudiantes de ambos sexos de Pre-Kinder hasta Cuarto año. Lo que comenzó con una “escuelita” con solo tres grados primarios creció y creció y ya para 1957 la nueva escuela superior estaba lista, recibiendo también a los estudiantes del Colegio Santa Teresita.  

La primera clase graduada del Colegio San Conrado fué en el 1950. Se graduaron 32 estudiantes de Kinder y 53 de primer grado. En el 1958 se gradúa el primer grupo de cuarto año: 18 estudiantes. 

 

En nuestros salones nació la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico. Actualmente, la administración está a cargo de Padre Rafael Alvarado (Director y Párroco), Sister Nildred Rodríguez, CSJ (Principal) (clase 1962), y Sister Judy Antongiorgi, CSJ (Asistente administrativo). 

 

El Colegio San Conrado ha podido mantener la calidad de enseñanza debido a la gran cooperación de maestros, de la administración y de la Asociación de Padres y Maestros (PTA). Nuestro Colegio cuenta con la acreditación de Middle State Board of Education y el Consejo General de Educación de Puerto Rico. La buena semilla que ha sembrado el Colegio San Conrado se puede observar en sus egresados, ciudadanos comprometidos con la Iglesia y la Patria; personas de carácter, seguros de sí mismos, con una formación espiritual-moral y cognoscitiva que son ejemplo para la juventud. 

 

San Conrado, “El portero bendito” seguirá a través del tiempo abriendo sus puertas a todo aquél que esté dispuesto a recibir una educación de excelencia en todos los aspectos de su vida.

¿Quién fue San Conrado?

 

San Conrado de Parzham

 

Conrado, cuyo nombre bautismal era Juan, nació en una finca cerca de la Villa de Parzham en Baviera en el año 1818. Inflamado de su gran amor por la Santísima Virgen, rezaba el rosario todos los días y en los días de su fiesta hacía una peregrinación a un lugar remoto y distante donde había un santuario de Nuestra Señora. Estas peregrinaciones las hacía siempre a pie, en constante oración y bajo riguroso ayuno. 

Habiendo pasado su juventud en una finca, grandemente unido con Dios, decidió a los 31 años dejar su vida de campesino y ofrecer el resto al mundo. Después desechó de su herencia. Fue admitido como hermano lego en la orden Capuchina y enviado al convento de Santa Ana en la ciudad de Attoitting, que se hizo notable en Alemania por su bellísimo Santuario en honor a la Virgen de la Misericordia.

 

Le fue otorgado a San Conrado el cargo de ser portero por más de 30 años durante los cuales benefició grandemente tanto a los habitantes de la ciudad como a los forasteros, a quienes atendía en los asuntos del cuerpo y el alma.

 

Cuando sus fuerzas físicas lo abandonaron, obligándole a notificar su debilidad a su superior, se vio forzado a ir a la cama. Tres días después, los niños, a quienes la noticia de la enfermedad del santo solo había llegado por instinto, acudieron alrededor de su cuarto rezando el rosario. 

 

Según San Francisco de Asís, murió con la música de los pájaros que tanto amaba. San Conrado murió escuchando las voces de los niños que tanto quería. El 21 de abril de 1894, el portero Capuchino escuchó el sonido de la campana por la que pacientemente había guardado y por última vez corrió hacia la puerta, donde Cristo lo esperaba.

 

Sus heroicas virtudes y los milagros que llevó a cabo le ganaron la atención del Papa Pio XI, quien en 1934 puso su nombre en la lista de los Santos.

Himno del Colegio San Conrado

¡Adelante! será nuestro grito,

nuestra enseña será la virtud,

San Conrado el portero bendito,

que derrama torrentes de luz.

 

Tú la cuna de nuestros amores,

Tú la cumbre de nuestra grandeza,

serás gozo de nuestros amores,

y esperanza de nuestra riqueza.

 

¡Adelante! será nuestro grito,

nuestra enseña será la virtud,

San Conrado el portero bendito,

que derrama torrentes de luz.

Directores

1948 – 1949 Padre Kevin Miller, O.F.M. Cap.

1949 – 1950 Padre Lionel Asbacher, O.F.M. Cap.

1952 – 1953 Padre René, O.F.M. Cap.

1953 – 1959 Padre Owen Schellhose, O.F.M. Cap.

1959 – 1962 Padre José Diego Pedraja, O.F.M. Cap.

1962 – 1969 Padre Segmund O’shaugnessy, O.F.M. Cap.

1969 – 1972 Padre Duein Haselhortst, O.F.M. Cap.

1972 – 1976 Padre Robert McCreary, O.F.M. Cap.

1976 – 1979 Mons. Pedro J. Ballester

1979 – 1989 Mons. Rafael Santiago

1989 – 1993 Mons. Francisco Vélez

1993 – 1994 Padre Segismundo Cintrón

1994 – 2003 Mons. Pedro J. Ballester

2003 – Padre Rafael Alvarado

Principales

1948 – 1951 Sister Clare Ellen, CSJ

1951 – 1955 Sister Polycarp, CSJ

1955 – 1960 Sister Clare Ellen, CSJ

1960 – 1965 Sister Ann Cecilia, CSJ

1965 – 1967 Sister Helen Gerard, CSJ

1967 – 1979 Sister St. Timothy, CSJ

1970 – 1979 Sister Winifred, CSJ (Elemental)

1979 – 1984 Sister María de Sales, CSJ

1979 – 1981 Sister Teresa Magdalene, CSJ (Elemental)

1981 – 1983 Sister Agnes Claudia, CSJ (Elemental)

1983 – 1988 Sister Margaret Maloney, CSJ (Elemental)

1984 – 1988 Sister Loretto de Sales, CSJ

1988 – 1988 Sister Rosario María, CSJ (Elemental)

1989 – 2015 Sra. Wilma B. de Echevarría (Elemental)

1989 – Sister Nildred Rodriguez, CSJ

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